martes, 7 de diciembre de 2010

Espero curarme de ti. Jaime Sabines

 

 

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.

¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»... Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).

Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.

3 comentarios:

Filos en Mundo de Sofía dijo...

Ese poema es uno de mis favoritos de Sabines, me encata.

Un gran saludo.

Elva*

Santi Salamanca dijo...

Me encanta. La idea de salir de una casa de locos en la que al menos hay vida y entrar en un cementerio es cierta a su manera.
También me llamó la atención lo de decir te quiero con otras palabras, eso también lo hacen las madres.
Me ha gustado mucho tu blog, te sigo.
Te dejo aquí el mío. ¡Sígueme si te gusta!

Santi Salamanca dijo...

http://yourdowntown.blogspot.com/